Suertes Viejas, Las
Una
suerte, en nuestro caso, es una finca situada al lado de otras más,
de similares dimensiones, cuya propiedad suele provenir del reparto de
una hacienda de propiedad comunal. Es precisamente el método de
reparto, el sorteo de lotes en que se ha dividido la propiedad comunal,
el que da el nombre a este tipo de fincas. Normalmente la finca original
de la que surgen los repartos suele ser monte, como se puede apreciar en
este paraje en las zonas de difícil laboreo. El adjetivo viejas
nos indica que fueron las primeras fincas que se repartieron por este método,
en oposición a otras más modernas de las que no se conserva
topónimo con el formato de Suertes Nuevas, o similares.
La palabra Suerte deriva del sustantivo
latino Sors (= suerte), formada a partir del genitivo del
mismo, Sortis. Vieja proviene del adjetivo, también
latino, Vetula (femenino de Vetulu) que era diminutivo de
Vetus (= viejo) y al que sustituyó en el latín vulgar.
No se encuentra documentado ni en 1732 ni
en 1752. |