Victoriano Campos Izquierdo (1830-1915)

Publicado el 5 de septiembre de 2012
Ampliado el 15 de febrero de 2017
Por Salvador Barrio Onrubia

Partido de aquí, se fue a su patria, y le seguían sus discípulos. Llegado el sábado, comenzó a enseñar  en la sinagoga: y muchos de los oyentes, admirados de su sabiduría, decían: ¿De dónde saca Éste todas estas cosas que dice? ¿Y qué sabiduría es ésta que se le ha dado, y de dónde tantas maravillas como obra? ¿No es Éste aquel artesano, hijo de María, primo hermano de Santiago, y de José, y de Judas, y de Simón? ¿Y sus primas hermanas  no moran aquí, entre nosotros? Y estaban escandalizados de Él. Mas Jesús les decía: Cierto que ningún profeta está sin honor si no en su patria, en su casa y en su parentela. Por lo cual no podía obrar allí milagro alguno grande: curó solamente algunos, pocos, enfermos imponiéndoles las manos.

Mr. 6, 1-6

Presentación

Afrontamos en este artículo el estudio de la vida de Victoriano Campos Izquierdo. Veremos cómo prosperó en los negocios, básicamente relacionados con el terruño,  y estuvo residiendo en tres pueblos distintos, manifestandose su influencia en cada una de estos lugares.  Victoriano procedía de una familia en la que sus ancestros también habían dejado patente su presencia en la vida de la comarca y fuera de ella, y de ello damos aquí cumplidas referencias. También veremos que un hijo suyo, sacerdote, murió en muy estrañas y desagradables circunstancias.

Nacimiento y estancia en Piquera

Nuestro personaje nace en Piquera el 23 de marzo de 1830 y es bautizado en la iglesia parroquial de dicho pueblo dos días después. Ofrecemos, a continuación, una ficha con la recopilación de los datos principales de la partida de Bautismo y la reproducción fotográfica de la misma que fue inscrita en el libro tercero de Bautizados  y Difuntos de la Iglesia de San Juan Evangelista por el presbítero Eusebio Hernández, un sacerdote que llevaba ejerciendo su labor pastoral en Piquera desde 1806 y que murió nueve años después de administrar este bautismo^[1].

Victoriano fue el hijo mayor de los padres que se han indicado más arriba y tuvo también como hermanos a: Ignacia (nacida en 1832), Plácido (1834) y León (1838). Posteriormente su padre enviudó y se casó con Fernanda Tomás con quien tuvo los hijos, hermanos de un costado de Victoriano, siguientes: Mariano (1842), Zacarías (1845), Francisco (1850) e Isabel (1852).

Su hermano Zacarías fue canónigo en la catedral metropolitana de Valladolid. Además, Victoriano tuvo un tío, hermano de su padre, llamado también Zacarías, que fue capellán en Roma de la iglesia española de Santiago y Monserrat^[2]. Dos tíos-abuelos, hermanos de su abuelo Ventura, también ejercieron el sacerdocio; se llamaban Cirilo y Tomás (éste fue rector y canciller de la Universidad de Santa Catalina de el Burgo de Osma durante un par de años)^[3].

Pasando a comentar la infancia de Victoriano, no hemos encontrado noticias de sus estudios, que suponemos que formalmente se limitasen a los que se impartían en la escuela primaria de Piquera (posiblemente algún año con el maestro y sacristán Mateo Molinero), pero que se complementarían notablemente con la instrucción de sus progenitores. También es posible que recibiese algún tipo de instrucción del párroco Germán Saez de Santamaría, quien unos años después estuvo de catedrático de Griego y Retórica y de Poética en el Instituto de Soria.

Ya en su mayoría de edad, el 26 de junio de 1852 Victoriano se casó con Marcelina Rupérez de Miguel, oficiando la ceremonia del matrimonio el sacerdote José María Blázquez^[4].  Victoriano tuvo con Marcelina los siguientes hijos, en Piquera: Celestina (nacida en 1853^[5]), Pío (1855^[6]), León (1856^[7]) y Sotero (1863^[8]). Fueron abuelos maternos, según las partidas de Bautismo, Julián Rupérez y Nemesia Crespo, aunque en alguna a la abuela la citan como Crescencia Crespo. Llamo la atención de que no se quedan aquí las irregularidades, ya que, manejando cualquiera de los dos nombres de la abuela, no se corresponde el primer apellido de la abuela con el segundo de la madre (Marcelina), ya que debería ser el mismo.

En 1864 Victoriano figura en Piquera como integrante de la Junta Local de Primera Enseñanza, en virtud de ser padre de familia. Le acompañaban en esa junta: Valentín del Val (alcalde), Vicente Hernández (Regidor), Román Rubio (párroco) y Gregorio Rincón y Juan Palomar (padres)^[9].

En 1865 le encontramos incluido en las listas electorales, correspondientes al municipio de Piquera, para elegir diputados nacionales a Cortes, constando que era labrador y propietario, y estando situada su residencia en la calle Real, 100^[10]. Comprobamos que acude a votar en las elecciones de los días 2, 3 y 4 de diciembre de ese año, siendo el único elector de Piquera que lo hace en el primer día^[11].

En 1866 aparece como uno de los arrendatarios de las fincas desamortizadas^[12] que se vendieron públicamente poco tiempo después, concretamente en 1868. La heredad que llevaba en arrendamiento constaba de un prado y varias tierras y antes de su desamortización pertenecía a la Fábrica (Iglesia) de Fuentecambrón. Este año de 1866 consiguió en subasta unas fincas desamortizadas de Propios: un monte de encina y un terreno baldío^[13]. En 1875 le correspondía cumplir con el décimo plazo del pago del monte de encina y el terreno baldío^[14].

El año 1867 es nombrado, por la Delegación de la Hacienda de la provincia de Soria a propuesta del ayuntamiento de Piquera, perito, junto con  Andrés Narro, para la repartición en Piquera del Impuesto de Consumos^[15].

Su estancia en Peñalba

Pero para entones ya estaba residiendo en Peñalba, donde había nacido, el año 1865, su hijo Buenaventura Lorenzo (licenciado en Medicina y Derecho por la Universidad Central de Madrid)^[16]. El 30 de septiembre de 1868 nacía su hija Marcelina^[17] (se le puso el mismo nombre que a la madre). Y unos  pocos días después de este natalicio moría la madre, posiblemente como consecuencia de alguna complicación durante el parto o inmediatamente después de él^[18]. Este mismo año de 1868 Victoriano había participado siendo testigo, junto con su hermano León y tres personas más, en las operaciones de reparto del término despoblado de Santuy^[19].

En 1874 se encuentra en un listado preparado para que sus integrantes formasen parte de algún posible juicio de jurado en el partido de El Burgo de Osma, figura en la lista de cabezas de familia, con el número de orden 166^[20].

En 1876 asiste, en Atauta, en representación de su pariente Manuel Campos Abad, a un juicio en Atauta^[20bis]. 

 En 1877 aparece, firmando como alcalde de Peñalba, en un anuncio para la formación del amillaramiento, publicado para el conocimiento de todos los propietarios con heredades en ese pueblo^[21]. Ese mismo año también se halla en una lista de donantes, en una colecta extraordinaria, que se realiza con ocasión del 50 aniversario de la ordenación episcopal del Papa^[22]. Asimismo consta como elector en el pueblo de Peñalba, figurando con la profesión de labrador y residiendo en la calle San Roque, 10^[23]. Son los mismos datos con los que figura en la lista electoral del año siguiente en el mismo pueblo y constando, esta vez, que pertenece a la sección de Valdanzo^[24].

Este mismo año de 1878 se cita una finca suya de Piquera en un deslinde de una parte del término para uso exclusivo de dos rebaños con la enfermedad de la viruela^[25]. Y también este año aparece firmando, como Alcalde, otro anuncio de amillaramiento del municipio de Peñalba^[26].

Los años siguientes de 1880, 1881, 1182 y 1883 figura en las listas electorales de Peñalba, con el mismo domicilio indicado más arriba (menos los dos últimos años, que no consta)  y dentro de la sección de Valdanzo (a excepción del penúltimo año, que no se indica ninguna sección)^[27].

Vemos que en 1885 hace un donativo de 10 reales para ayudar a paliar los daños de un terremoto ocurrido en Granada y Málaga^[28]. Este mismo año se publica, en el Boletín Oficial de la Provincia, un anuncio solicitando un soldado sustituto para realizar el servicio militar en Cuba^[29]. De las dos personas que se reseñan para que los interesados puedan contactar, una de ellas es Victoriano Campos. Suponemos que buscaba el sustituto para librar de cumplir con el servicio militar a su hijo Buenaventura Lorenzo.

Durante el bienio 1887-1888 se construyó la Cárcel Modelo del Partido de El Burgo de Osma. Para agilizar las gestiones se creó una Junta de Reformas de Cárceles del Partido, de la que Victoriano Campos formaba parte por el pueblo de Peñalba y con la condición de Vocal Concejal^[30], aunque pensamos que hay un error en el documento consultado y debía constar como propietario.

En 1887 formaba parte de la Junta Local de Sanidad, junto con el Alcalde (que la presidía), el médico, el veterinario y otros vecinos de Peñalba^[31].  Este mismo año es visto en la Diputación Provincial un expediente promovido por Victoriano Campos y otros vecinos sobre reconocimientos de servidumbres pecuarias, ya que su pariente Manuel Campos se había apropiado de parte de la cañada real que pasaba por las eras de este último^[31bis]. Este mismo problema seguía sin solución en el año 1889^[31ter].

Desde el 1 de agosto de 1887 fue juez municipal de Peñalba durante un bienio^[32]. El 1 de agosto de 1889 repitió en ese mismo cargo, durante otros dos años más^[33].

El año 1887 varios propietarios de Peñalba, entre ellos Victoriano Campos, publican un anuncio de acotamiento de sus pertenencias^[34] y el año 1888 es Victoriano, en solitario, el  que publica el anuncio para acotar únicamente sus propias fincas en Peñalba^[35].

Una década después, el 18 de diciembre de 1897, es ordenado presbítero su hijo Sotero, con 34 años de edad, en El Burgo de Osma^[36].

Su traslado a El Burgo de Osma

No sabemos exactamente cuándo pasa a vivir a la capital del partido judicial, pero nos encontramos con que a finales de 1901 es elegido, por Real Orden de 26 de diciembre de ese año, alcalde de El Burgo de Osma^[37]. Estuvo ejerciendo esta labor durante poco más de un año, pues a primeros de enero de 1903 vemos que presenta la dimisión^[38]  y pocos días después era nombrado nuevo alcalde Eustaquio Marqués^[39]. No obstante, continuó con su cargo de concejal durante tres años más. En El Burgo formaba parte de la junta directiva del partido liberal, del que era el primero de sus vocales^[40].

Suponemos que su traslado a El Burgo se debió a que:

• Tenía una avanzada edad, pues durante la anualidad que estuvo presidiendo el ayuntamiento cumplió los 72 años,

•  Su hija Marcelina estaba residiendo en esta población,

• Y ya no quedaría ninguno de sus hijos en Peñalba, por fallecimiento o por estar trabajando y residiendo sus posibles descendientes en otras localidades.

Con todo, seguía gestionando sus negocios de Peñalba, donde consta que, por aquellos años, era propietario y/o cosechero de vino^[41].

Su labor en la Alcaldía

Durante su presidencia de la alcaldía, en el año 1902, se estuvieron construyendo los edificios de las escuelas públicas de la calle Seminario (que se inauguraron el año siguiente), se anunció subasta pública para dotar a la villa de alumbrado público por medio de electricidad^[42], y se aprobó la construcción de la Plaza de Toros.

En lo concerniente a la construcción de las escuelas vamos a reseñar un incidente por el cual el Ayuntamiento nombró nuevo aparejador de las obras a don Daniel Marcos, decisión que fue recurrida por algunos concejales ante el Gobernador Civil^[43].

Relacionado con la Plaza de Toros hemos encontrado bastantes noticias en la prensa soriana de entonces:

• primero anunciando la intención del Ayuntamiento de acometer dicha construcción y el encargo de los planos al arquitecto provincial, Sr. Ibáñez^[44],
• la aprobación por el Gobierno Civil del pliego de condiciones de esa edificación (presentado por el ayuntamiento de El Burgo)^[45], y
• el anuncio de la subasta de las obras con un presupuesto de 54.932,27 pesetas^[46].

Se puede ampliar la información sobre esta plaza de toros, y su construcción, en el libro que sobre este coso escribió Jesús Alonso Romero y editó en 2005 el Ayuntamiento de El Burgo de Osma^[47].

Otras noticias relativas a esta alcaldía, durante ese año de 1902, y a nuestro protagonista que la presidía, fueron:

• Una reclamación, ante el Gobernador Civil, de Juan Martínez y otros vecinos contra un acuerdo del Ayuntamiento por el que se establecía un arbitrio sobre las lanas^[48].

•  El 7 de octubre de 1902 la Comisión Provincial informa favorablemente los expedientes instruidos por el Ayuntamiento, solicitando la autorización del déficit que resulta de sus respectivos presupuestos. El día siguiente esta comisión evacuó un informe, solicitado por el Gobernador, acerca de los presupuestos adicionales y refundidos presentados por este Ayuntamiento^[49]. El mes anterior, el día 18, se había pedido al Delegado de Hacienda un informe sobre el expediente de arbitrios extraordinarios formado por el Ayuntamiento de El Burgo ^[50].

• El 20 de febrero de 1902 notifica el Alcalde, Victoriano Campos, que se le ha informado del mal estado en que se encuentra el tejado y puerta principal de la ermita de las Magdalenas y la falta de varias cruces del Calvario, cuyo arreglo corresponde al Municipio. Después de debatido el tema, se resuelve que los componentes de la Comisión de Obras practiquen un reconocimiento con la brevedad que les sea posible sobre dicha ermita y cruces del calvario, formando un presupuesto, del coste de las obras que sean precisas realizar, presentándole al Ayuntamiento^[51].

•  Con ocasión de la feria del 7 al 11 de noviembre, el ayuntamiento anuncia el programa de actos y organiza un concurso de ganados, con la concesión de numerosos premios que se hacen extensivos a las barracas y espectáculos de la feria, con una aportación del Gobierno para dotar estos premios de 2000 pesetas^[52].

•  Al ser El Burgo la villa que encabeza el partido judicial, su ayuntamiento estaba encargado de la convocatoria de los representantes de todos lo pueblos del partido para la discusión y aprobación de todos los gastos carcelarios^[53]. Otro tanto sucedía con lo que tenían que abonar los pueblos por el pienso de las caballerías de las tropas^[54].

Los últimos años de su vida

 El 25 de marzo del año 1911 fallecía en Alcozar, de donde era cura ecónomo, su hijo Sotero, al disparársele una pistola de la marca Browning que él mismo llevaba en el bolsillo de su pantalón. Allí tuvo que desplazarse Victoriano, cuando acababa de cumplir los 81años de edad, y gestionar todos los trámites relativos al entierro de su hijo^[55].

Finalmente, nuestro biografiado, Victoriano, acababa sus días el 11 de mayo de 1915 a consecuencia de “uremia”. Fue enterrado en el cementerio de El Burgo, donde se encuentra su tumba, nada más franquear la puerta de entrada al camposanto. En el acta de defunción del Registro Civil consta: que había hecho testamento el 10 de febrero de ese año, ante el notario Lorenzo Ágreda; que en el momento de su muerte estaba viviendo en la calle Acosta, número 5; y que vivían sus dos hijas, la mayor y la menor: Celestina y Marcelina^[56].